Estábamos preparando nuestro post de marzo con los planes que os podíamos ofrecer en Semana Santa en la Sierra de Guara, cuando casi sin darnos cuenta, un bichito llamado Covid-19 entró en nuestras vidas para ponerlas patas arriba. Así que apelando a nuestra responsabilidad, acatamos a pies juntillas el cerrar las puertas de nuestros negocios para cuidar de vosotros, a la vez que de nuestras familias y de nosotros mismos.
Vivimos en la Sierra de Guara porque unos nacimos aquí y, creímos que esta tierra a pesar de las dificultades que conlleva vivir en pueblos en los que no siempre hubo Internet, ni las carreteras fueron tan buenas como ahora, tenía futuro. ¡Y luchamos por ello! Otros vinieron luego y se enamoraron de los paisajes singulares, de su tranquilidad, de su aire puro, de sus ríos, de sus atardeceres, de sus pueblos, de ese estilo de vida cercano a la tierra y de sus gentes, y decidieron instalarse en la Sierra de Guara e iniciar aquí un futuro para ellos y sus familias.
Los días han ido pasando y todas y cada una de las personas que elegimos la Sierra de Guara como nuestro hogar, estamos trabajando con mucha ilusión y muchas ganas para que, tal y como establezcan las Autoridades Sanitarias podamos volver a abrir nuestras puertas en breve con plenas garantías para todos, hasta la fecha siempre hemos hecho bien las cosas, y así lo seguiremos haciendo.
Daros las gracias por todos esos mensajes de apoyo que hemos recibido durante este tiempo de confinamiento en nuestras redes sociales, esperamos teneros pronto de vuelta por la Sierra de Guara para que disfrutéis del turismo de calidad del que siempre hemos sido estandarte.
Nuestro corazón, ese que palpita con pasión y, en el que se funden la tierra, el agua, el fuego y el aire únicos de la Sierra de Guara, sigue estando a vuestro lado.
¡Que tengáis un buen día!